Hoy es lunes y he sobrevivido a un finde ajetreado de verdad, en compañía de buenas gentes y descubriendo lugares nuevos.
Después de salir el viernes de trabajar comenzó una larga e intensa velada donde se mezcló el sabor de la Beamish con compra de vuelos de ryanair, interesantes conversaciones y encuentro con personas antes desconocidas
Sin ninguna resaca amanecí el sábado por la mañana y me junté con una cuadrilla interesante, tres vascxs, un italiano, un palentino, y mi inseparable galego y partimos rumbo a la lejana villa de Bandon (30 km :-P).
La razón de ir a este pequeño pueblo era porque la cuadrilla a la que nos unimos se conoció ahí unos meses atrás haciendo un curso de inglés y es donde dieron los primeros pasos en tierras irlandesas.
Cuadrilla de Bandoneros con el galego infiltrao
Mucho no había que ver así que estuvimos disfrutando de un encantador pub tradicional donde jugamos a los dardos y bebimos beamish con vasos de pinta la ostia de antiguos. Que sitio más acogedor.
Vasos de pinta con un puñao de años
Una partida de dardos
Joni tiene un bombardero
Y el domingo me fuí a visitar la Cork City Gaol que es una vieja prisión en desuso desde 1923 donde cumplían condena presos por delitos de robo menor principalmente. Ahora la tienen montada con muñecos de funcionarios y presxs para mostrar y hacer una idea de como era.
Leandro descansando despues de la cuestecita con la bici
Cork City Gaol
La verdad es que deja un poco que desear pero es algo nuevo que ver despues de un año jejeje.
Como veis siempre hay algo que hacer en este pequeño pueblo segunda ciudad de Irlanda. Ale, un beso fuerte.
1 comentario:
Pues sí, mejor con las fotos. Qué envidia chaval!
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