14 octubre 2008

Silvia

Como contaba hace algunos días, es época de cambios.

Igual que la gente de repente aparece en tu vida, también desaparecen, aunque si es cierto que aunque desaparezcan fisicamente, siempre quedan en el corazoncito.

Hoy le tocó marchar a Silvia, otra miembra de nuestro Spanish Cork´s team, en este caso con rumbo a la Iruñako merindadea o merindad de Pamplona, donde coincidiendo con Dani va a buscar rumbo as her own role: diseñadora de interiores.

Y aunque diga la popular canción Sevillana que algo se muere en el alma cuando un amigo se va, en este caso no se muere, si no que se aviva y queda el gran recuerdo de mi primera y única amiga en Cork.



Es cierto que conozco más mujercillas por ahí, pero con Silvia he compartido muchos momentos desde que Dani y yo la ofrecimos ir a tomar algo en el Sheilas Hostel y hablamos por vez primera. Desde entonces, pocas veces ha dicho esta chica que no tras la pregunta de si vamos a tomar una pintica.

Nada chica, que como bien te dije, es muy positivo empezar nuevas etapas cargadas de ilusiones. No hace falta que te deseo lo mejor y tatatatatata.



Nos volveremos a encontrar en este camino, quizá en Cork y seguro fuera de Cork que de momento aquí nos quedamos para seguir viviendo esta aventurilla.

Pendiente ha quedado el ir de compras para hacerme una renovación de vestuario que lo teníamos acordado jaja.

Un besote muy fuerte!!!


1 comentario:

Abel dijo...

Al final te vas a tener que venir tú también a Nafarroa, xDDD.